Sabemos que la espontaneidad es una cosa que se valora mucho al charlar de las relaciones íntimas. Semeja como si el único valor a tomar en consideración fuera la pérdida de la parte más racional de nosotros mismos que la pasión más exacerbada trae consigo. No hay que hacerse entusiasta de nada. De la espontaneidad, tampoco. Un poco de planificación no viene nunca mal. Ni tan siquiera cuando se habla de encuentros sexuales. Un pequeño guión sobre lo que se desea y el camino que se va a seguir hasta conseguirlo no tiene porqué matar el ardor de ese encuentro. Una relación perfecta de pareja sostiene la ilusión renovada de compartir con entusiasmo, mejorando la capacidad de solucionar los enfrentamientos, comprendiéndose mutuamente, eliminado la censura del diálogo y mantener una relación durable basada en el amor. Isabelle había cumplido los 12 años dos meses ya antes que yo. Las dos vivíamos nuestra adolescencia de fin de semana juntas. Su casa estaba en el campo. Cerca de la entrada había un columpio, atado a las ramas de una encina, donde se producían nuestras mayores discusiones. Calentábamos agua ficticia en teteras de plástico y servíamos el té, en estricto orden, a los muñecos que se habían congregado cerca de la mesa. Yo siempre y en toda circunstancia intentaba darle el pedazo de pastel más grande a mi nounours, aunque no siempre y en toda circunstancia era fácil, pues Isabelle asimismo tenía su preferido. Así que volvíamos a discutir. Veníamos haciendo esto desde hacía años, y hallaba que eso era ya cosas de niñas, pero Isabelle siempre y en toda circunstancia prefería eso a ir a ver jugar al fútbol a los chicos. Me gustaba Hervé y a Isabelle asimismo. Por lo que acabábamos discutiendo. Como cuando se empeñaba una y otra vez en poner el mismo disco de música pop en el tocadiscos que le terminaban de regalar.
De acuerdo con la teoría de los modelos sicológicos de Carl Jung, cada individuo pertenece a uno de 2 tipos diferentes, que se distinguen por la dirección de su interés, por el movimiento de la energía. Como sucede habitualmente entre un hombre y una mujer, se despierta el interés y la atracción porque uno es extrovertido y el otro retraído. Representan 2 polos opuestos que se atraen. En ocasiones se les solicitarán que hagan el sexo enfrente de amigos o bien obligar a sus parejas a consumir el acto con sus conocidos; cubrir el cuerpo con diferentes sabores, obligando a la pareja a lamerlos, cosa que a muchos complace pero que otros lo toman como asqueroso; son tan extensas estas ideas, hasta donde la imaginación del humano pueda llegar. Fuimos en el coche de Jorge, aparcamos en el aparcamiento y nos dirigimos a la entrada del Opción Noche, no sabia a que hora llegarían ellas, por lo que no dejaba de mirar cada dos por 3 el teléfono, a ver si tenia alguna llamada perdida deAinhoa o bien si tenia cobertura en el móvil. Cerca de las 12 de la noche recibí la llamada perdida aguardada, y en ese instante me acojone un tanto, pensé y si me afirma que no puede venir… espe raba con todas y cada una mis fuerzas que no fuera de esta forma. La llame al instante.
El yo social: presentación de sí con el poder
En el ajedrez también, por momentos, se puede tornar complicado hacer un movimiento sin que nos perjudique: por nuestros errores anteriores, cualquier cosa que hagamos no hará más que empeorar la situación en la que estamos. La opción mejor sería no movernos, lo que se conoce con el nombre de zugzwang (que viene del alemán Zug, jugada, y Zwang, coacción, obligatoriedad). En esos casos, tomando de forma análoga sus ideas, será mejor jugar otra partida directamente en lugar de procurar remendar los fallos, es decir, intentar buscar otra mujer con la que podamos hacer bien las cosas. EL IMPERATIVO DE LOS PRELIMINARES. Suena arriesgado, mas ya pasó la edad dorada de los dichosos preliminares. Se hicieron imprescindibles para abrir la psique a otro modo de disfrutar considerablemente más sensible y satisfactorio, mas hay que dejar de mentarlos y elevar el listón de demandas. A veces basta un momento para saber que lo que está a punto de acontecer es algo magnífico que nos tocará el ánima. Quizá sucede de forma espontánea, tal vez porque nuestro cerebro erótico lleva tiempo haciendo las veces de preliminares, alimentando un deseo, generando esperanzas y preparándose para ese momento culminante. La contestación de nuestro cuerpo es entonces automática. Sin entrenamiento anterior de ningún género.
El ano es muy sensitivo, se siente muy bien estimularlo, no lo abandones. Eso sí, si te andas ahí, ya no puedes tocarte adelante. Riesgo altísimo de infección. Para eso, te recomiendo ponerle un condón a un vibrador pequeño, y ponerlo a andar. Comienza por ese pedacito de piel entre la vagina y el ano, (perineo), rózalo apenas, hasta el momento en que encuentres el ritmo adecuado para ti. Una esencial precaución con tu puerta trasera es no introducir juguetes pequeños. Podrían ingresar muy adentro de ti y necesitarás ir a una sala de emergencias. Envíele una nota a su amante diciéndole sobre la habitación especial en su casa dedicada al placer. En ella, hay una cama de terciopelo y mantas de piel sintética. Tu amante está invitado a pasar unas horas en este cielo sensual, contigo como la amante del placer erótico. Lo que precisamos es un nuevo ideal para la virilidad, un hombre que pueda devolver el sexo a su carácter sagrado original, que sea capaz de hacer el amor de tal manera que abra la puerta a la iluminación para su amado y para él mismo y cumpla sus más profundos anhelos. El significado de la vida. Precisamos educación para hacer el amor porque va a aumentar nuestras elecciones y nuestro conocimiento. No tenemos que asumir las actitudes que nos transmite la sociedad. Podemos adoptar nuevas actitudes que nos sirvan mejor y nos asistan a tener una vida cariñosa más satisfactoria, feliz y saludable.
Hete aquí ciertos ejemplos del proceso mental que observo
En definitiva, hombres y mujeres tenemos del mismo modo necesidades sexuales y afectivas, es triste ver que algunos hombres fingen aprecio para lograr amor y ciertas mujeres fingen en el sexo para lograr afecto; cuando claramente podríamos exponer nuestras emociones y nuestras necesidades, ¿deseas sexo?, puesto que tenlo mujer sin necesidad de fingir u obligarte a sentir amor para justificar una relación íntima, y hombre si deseas sexo, simplemente proponlo sin estar fingiendo que la amas para llevarla a la cama, ciertas admitirán y otras no, mas no quedará en tu consciencia ni degradarás tu virilidad por haber engañado. El que las mujeres tengamos sexo sin amor no significa que no valores tu cuerpo o bien que no te respetes a ti, sólo significa que deseas sexo (igual que el hombre), no es preciso compromisos ni de planificación de nupcias, es únicamente tu resolución, intimar con un hombres que sólo te agrada no es falta de autoestima; deja de engañarte a ti y comienza a disfrutar de tu sexualidad con la mayor de la las libertades; eso sí, cuídate y extrema las medidas sanitarias para prevenir infecciones de transmisión sexual o un embarazo no deseado, y empieza a gozar lo que por siglos nos han negado simplemente por el hecho de ser mujeres. Como ella está en la cima, tiene control sobre el ángulo y la profundidad de sus golpes. Puede inclinar sus caderas para ajustar el ángulo de su enfoque, o para mostrarle dónde precisa un poco más de TLC. Ya que su atención está en ella, ella puede decirle instrucciones y decirle lo que quiere.
Hola mi nombre es Rebeca y soy una sensual argentina que te va a dejar sin aliento
Este era un juego que jamás había jugado ni se le había ocurrido. Estaba nervioso y sus dos primeras puñaladas en las cuentas fallaron por completo. El tercero los capturó y mientras él tiraba en su excitación ellos se soltaron del taco y se distanciaron del coño de ella. ¿Pues? Porque no deseas posibilidad de que pase por su cabeza terminar pues sexualmente la relación no funcione o bien simplemente porque tú sabes hoy por hoy que si una relación no está sólida en el aspecto sexual, es muy posible que otras resoluciones se tomen en tu contra debido a este detalle. Sin embargo, las mujeres y los hombres persisten en sentir que les agradaría proceder de la misma estimulación de empuje. Y hay una forma de hacerlo: puentear. La maniobra del puente significa simplemente utilizar la estimulación del clítoris para llevar a la mujer al límite de la venida, entonces desistir y la mujer que viene siguiendo ciertos empujes más del hombre. Este es un proceso de 3 pasos que cualquiera puede aprender, si bien requiere práctica. Si llegas al paso dos y sigues por ese camino, aún estarás en un buen sitio. Nos reímos muchísimo y pasamos buenísima tarde como dos renacuajos. Pude revisar si sabía las cosas esenciales sobre mí y sobre nuestra relación, y si le había contado todas y cada una de las cosas que significaban mucho para mí. A propósito, ella terminó ganando y bien que me lo echó en cara. Es desastroso tener una cita desganada. En verdad, en una encuesta que hice preguntándole a muchas chicas guapas, qué más les gusta de un hombre en una cita, una de sus contestaciones incesantes fue que las hiciera reír. Si un hombre las puede hacer reír, es alguien deseable, es alguien con quien quieren estar.